Por: IDAYSI CAPOTE

El jonronero cubano César Prieto ha bateado su mejor juego colocando la bola en Estados Unidos.

Un pelotero más que huye del comunismo anti cubano y del poco valor que recibe económicamente alguien con potencial de ganar la gloria en las Grandes Ligas de Béisbol.

Me alegra que Prieto, de tan sólo 22 años, aprovechara esta gran oportunidad de vida, triunfos y millones de dólares también que merece por su extraordinario don que Dios le dio.

En Cuba lo tildan de traidor, pero esos jóvenes atletas desde niños pasan penurias en escuelas internas, donde el hambre es una constante y precarios los elementos necesarios para entrenar.

Vi jóvenes descalzos en pleno gimnasio haciendo su rutina diaria de entrenamiento.

Estas generaciones de deportistas cubanos han visto el desprecio de estrellas de varios deportes que lo dieron todo por Cuba, para ostentar medallas que cambiaron al color del olvido y la miseria.

Han despertado estos jóvenes que les deben sólo a Cuba por nacer en este archipiélago usurpado por el régimen dictatorial Castro-canel.

No están en deuda con la dictadura. Bastante se aprovechan de lo que les quitan de los premios que ganan, de los certámenes deportivos donde brillan.

Ahora pondrán a sus compañeros del equipo -que intenta clasificar para los juegos olímpicos de Tokio- a repudiar la actitud de César Prieto y en realidad unos lo harán por envidia y otros porque este hijo de Cienfuegos no avisó de su intrépido paso para sumarse otros.

Y no podía ser de otra manera, porque el silencio es aliado donde el peligro acecha.

Imagino portando grilletes electrónicos u otro aditamento de control al resto del equipo que pernocta en tierra de libertad aún.

El control por la seguridad del Estado cubano será excesivo para evitar una deserción masiva.

El Imperio Yanqui no es el culpable de que huyan del comunismo los deportistas cubanos. Es ese modelo social disparatado, cruel, absurdo y anti humano el que impulsa a huir desde Cuba a cualquier lugar del mundo libre.

Ya la doctrina les falla. Fidel Castro pudo doblegar a muchos deportistas campeones mundiales y olímpicos a regresar por un automóvil marca Lada, o por vivir en la impunidad de casi todo, como el pelotero Luis Ulacia que mató a un joven de 19 años en un accidente de tráfico por ir ebrio al volante y quedó impune.

Donde el alcoholismo es frecuente como lo sufrió Teófilo Stevenson al darse cuenta muy tarde de que que quedarse en Cuba fue el combate que lo humilló.

Dictan la sentencia de culpable al bloqueo o embargo económico de USA contra Cuba, y me pregunto:

¿Cómo hay torneos de golf y campos con todo el lujo y cuidados que necesita este deporte de élite?

¿Cómo existe el torneo de pesca de la aguja en honor al escritor premio Nobel, Ernest Hemingway?

¿Cómo hay regatas y lo que se les ocurra y no interviene el bloqueo selectivo y burlado por la dictadura y el robot Castro-canel?

¡Viva César Prieto!

¡VIVA LA LIBERTAD!

¡VIVA CUBA LIBRE!

@idaysicapote

Foto tomada de Google